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Un invitado incómodo en la fiesta del TLCAN: El camino de las fábricas chinas a EEUU pasa primero por México | 
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| Aumenta cada vez más el volumen de importaciones de acero chino en toda América Latina. Sólo en octubre de 2012, por ejemplo, los productores siderúrgicos chinos exportaron a América Latina productos por un valor de US$ 3.515 millones. Según un estudio conjunto hecho recientemente por las asociaciones siderúrgicas de México, Brasil, Colombia y Argentina, las exportaciones del acero chino a América Latina "crecieron de forma significativa, de tal manera que hoy amenazan la cadena de valor de la industria local".
El país que más sintió la amenaza fue México. Según Canacero, asociación de fabricantes de acero de México, las importaciones mexicanas de chapas laminadas procedentes de China aumentaron un 140,6% al año entre enero y noviembre de 2012. ¿Por qué los fabricantes de acero de China sienten tanta atracción por México? ¿Su expansión en el país es señal de que los fabricantes chinos en breve montarán sus automóviles en México y exportarán parte de esa producción a EUA? ¿O los chinos instalarán sus fábricas en EUA para beneficiarse de las ventajas comerciales ofrecidas por el TLCAN (Acuerdo de Libre Comercio de América del Norte)? ¿Qué diferencia las relaciones de comercio y de inversiones de China con México de las relaciones que los chinos tienen con otros países latinoamericanos, como Brasil y Colombia?
Las oportunidades para las siderúrgicas chinas en México han crecido debido a la fuerte demanda de acero por parte del sector automotriz mexicano. Empresas como Honda, GM, Nissan y Ford tienen fábricas en México, cuya producción se exporta en gran medida a EUA. El director de la asociación mexicana de la industria automotriz (AMIA) anunció recientemente que la producción del sector automotriz de México continuará creciendo en el transcurso de los próximos cinco años a un ritmo anual del 8% al 10%, llegando a 3,9 millones de unidades en 2016. Se estima que la producción automotriz mexicana llegue a 2,86 millones en 2012, según datos de la MC Automotive, consultoría del sector, dada la fuerte demanda de vehículos en EUA.
En septiembre, el fabricante de automóviles de lujo Audi anunció que construirá una fábrica de US$ 1.300 millones en Puebla. Será su primera fábrica en América Latina. Buena parte de la producción de automóviles en México se exporta a sus socios del TLCAN, EUA y Canadá. En 2012, se vendieron en México solamente cerca de 990.000 a un millón de vehículos fabricados en el país. Se estima que en los próximos años por lo menos otros tres fabricantes podrían instalarse en México, y no serían sólo empresas alemanas. ¿Serían chinas? Durante el Gobierno del ex presidente Felipe Calderón, México y China anunciaron que estaban cerca de convertirse en "socios estratégicos". Pero el significado de esa asociación emergente se definió de una manera muy imprecisa. Enrique Dussel Peters, profesor de Economía de la UNAN, Universidad Nacional de México, destaca algunas fuentes específicas de la relación entre China y México:
- Las élites mexicanas comenzaron a integrarse al TLCAN en 1994, cuando el acuerdo de libre comercio fue creado. Eso ocurrió mucho antes de que los principales mercados de América Latina desregulasen su régimen de comercio. Como consecuencia de eso, "el comercio mexicano está bastante integrado en los flujos específicos de comercio de EUA y de Canadá".
- México prefiere resolver sus disputas comerciales a través de los paneles multilaterales de la Organización Mundial del Comercio, en vez de resolverlas de formas bilateral. Esa diferencia de mentalidad produjo "desconfianza y equívocos" en las relaciones entre México y China.
- Aunque China sea el segundo mayor socio comercial de México desde 2003 (sólo por detrás de EUA), los gestores de políticas mexicanos aún no tienen una estrategia clara y coherente con respecto a China. A pesar de la importancia cada vez mayor de China para los países del TLCAN, China continúa siendo un invitado no deseado del pacto. El país es de la mayor importancia para la región, sin embargo el TLCAN aún no ha sido capaz de oficializar la relación de sus países con China.
Una noticia optimista es el hecho de que el nuevo presidente Enrique Peña Nieto haya demostrado interés en una asociación más cordial con China. Con el ex presidente Calderón, la relación con China se vino abajo, porque él dio prioridad a la relación con EUA. Peña Nieto, sin embargo, cree que ha llegado la hora de diversificar las relaciones de México, en vista de la importancia cada vez mayor de Asia y, sobre todo, de China.
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Este es el resumen del artículo "Un invitado incómodo en la fiesta del TLCAN: El camino de las fábricas chinas a EEUU pasa primero por México" publicado en Marzo 19, 2013 en la revista Knowledge @ Wharton.
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