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Es hora de retomar la cortesía en el lugar de trabajo | 
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| El respeto hacia los demás debería ser un comportamiento estándar en el lugar de trabajo, sin importar el rol, rango o reputación. Pero a medida que las compañías se han hecho más virtuales, globales y estresadas, esta suposición podría fallar a menos que nos enfoquemos en ella de forma más explícita. En un pasado no muy distante, la mayoría del trabajo se llevaba a cabo, o cara a cara, o a través de conversaciones en tiempo real en la oficina, la fábrica, en reuniones o visitas a los clientes. Las interacciones personales le permitían a la gente conocerse entre sí y crear conexiones humanas. También favorecían un grado básico de cortesía, ya que es extraño tener contacto continuo con alguien rudo, irritante o poco agradable.
Para mucha gente hoy, la mayoría de la comunicación no es ni cara a cara ni en tiempo real. El email, el correo de voz, las teleconferencias y videoconferencias han reemplazado otras oportunidades de que la gente se reúna personalmente. Los gerentes están viajando más que nunca para mantener los contactos globales, reduciendo aun más el contacto regular con sus subordinados. El resultado es que mucho más de nuestro trabajo actual se realiza de forma impersonal, lo que podría significar menos presión para la observancia de delicadezas sociales. Un par de estudios recientes apoyan esta posibilidad. Uno, encontró que los estudiantes universitarios actuales son menos gentiles que los de pasadas generaciones, al parecer porque han crecido con más dependencia de la comunicación digital. Otro estudio encontró que los americanos tienen un tercio menos de amigos y confidentes que décadas atrás, posiblemente debido a que las interacciones digitales están reemplazando las conexiones personales.
En la ausencia de conexiones personales cercanas, muchos gerentes están reportando fallos en la cortesía y el respeto, muchos de ellos amplificados por el estrés en el trabajo. Y lo que es peor, la continuación de estos comportamientos creará eventualmente un ambiente tóxico que reducirá el compromiso entre los empleados y la motivación gerencial, lo que es algo que ya estamos viendo en algunas compañías. La mayoría de nosotros quiere trabajar con colegas que nos traten con respeto y cortesía. Sin embargo, en estos días tendríamos que dedicar un esfuerzo extra a hacer que esto suceda. Hay dos pequeñas (pero no fáciles) sugerencias para prevenir una ruptura en la cortesía y el respeto:
Primero, concierte una reunión con su equipo, incluyendo miembros virtuales, y hable abiertamente sobre el tipo de comportamientos que usted espera entre cada uno de ellos. El tener un diálogo abierto sobre este tema podría reorientar poderosamente a su equipo, haciéndolo estar más consciente de la cortesía en el lugar de trabajo y de cuando ésta esté faltando. Segundo, animar a su equipo y colegas a (cortésmente) repeler los malos comportamientos cuando éstos ocurran. La realidad es que la mayoría de la gente no planea ser mala o insensible; esto solo sucede en el calor del momento, sin que se den cuenta del impacto en otros. Si usted puede encontrar las formas correctas de llamar a capítulo estos comportamientos, sería posible reducir su impacto y prevenirlos en un futuro.
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Este es el resumen del artículo "Es hora de retomar la cortesía en el lugar de trabajo" publicado en Abril 2013 en la revista Forbes.
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