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4 señales de que estamos a punto de quemarnos | 
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| Un poco de estrés es vital para producir, cumplir las metas, pensar y crecer más, pero demasiado es tóxico. Y si no se controla, causará estragos en lo que se construyó con tanto esfuerzo. Una vez que lo arrincona el burnout, es difícil meter el genio en la botella. En su libro Transformando el Burnout, Alan Shelton, director médico en Puyallup Tribal Health Authority y médico de familia, comparte su experiencia al respecto. Aquí tenemos cuatro signos de que usted esté en camino del burnout:
1. Su balance trabajo-vida se ha vuelto un problema: Hablo de “balance” como la continua acción de manejar las mareas y flujos de la vida, en oposición a un estado estático e inaccesible. Llamo “levantones” a las cosas que lo ayudan (apoyo de los amigos y familia, una dieta adecuada, dormir bien, un sentido fuerte de propósito) y “hundimientos” a lo que exacerba su estrés (pensar con enfado, estrés en el hogar, preocupaciones, desorden). La meta no es eliminar los hundimientos sino reforzarlos con levantones. PRUEBE ESTO: Si se siente estresado respecto al balance trabajo-vida, sus hundimientos están ganando. Vuelva a enfocarse en los levantones, asegurándose de que está buscando activamente cosas que le levanten el ánimo y le hagan sentirse conectado con la gente de su vida, lo cual quita mucho del escozor de su respuesta de estrés.
2. El enfado y la ansiedad se han vuelto sus emociones principales: Estos sentimientos pueden volverse hábitos. Si se encuentra siempre en camino al enfado o la ansiedad demasiado rápidamente, la reacción puede tener más que ver con el burnout y menos con lo que realmente está ocurriendo. PRUEBE ESTO: Chequee su instinto. La próxima vez que sienta que el enfado o la ansiedad están destruyendo su enfoque, deténgase y analice sus instintos. Las emociones son disparadas por un pensamiento. Cuando usted pueda atrapar ese pensamiento y mapear su origen, puede sacar a la luz su miedo y darle nombre a su ansiedad.
3. Los conflictos son obstáculos diarios: Otro signo seguro de un burnout potencial es un nivel de conflicto en aumento entre usted y sus colegas y/o seres queridos. Los conflictos son tanto el resultado del estrés, como una causa que contribuye a este. PRUEBE ESTO: Manténgase conectado. Aún hay tiempo y energía para reconocer qué no está funcionando y por qué. Cuando esté sobrepasando el punto del conflicto (entrando en esa zona muerta, de total desconexión), será más difícil regresar. Trate de cambiar las mareas aquí. Para las peleas recurrentes, confróntese cara a cara con la persona involucrada para resolver las incomunicaciones y suposiciones y diluir la tensión.
4. Su pasión se vuelve su dolor: Una señal de que las cosas van hacia abajo es que la misma cosa que una vez lo inspiró y energizó, ahora lo deja exhausto. Una pasión deteriorada es señal de que algo va mal. Tal vez un enfoque diferente vuelva a activar el potencial, y su pasión. PRUEBE ESTO: Busque tiempo para restaurarse y tome distancia. No espere hasta que ya no pueda salir de la cama o tenga que tomar una larga licencia por enfermedad, use el tiempo libre que tiene, y los fines de semana para desconectarse del trabajo y conectar con la gente y las actividades que le den energía y no se la quiten. No tiene que estar en el suelo para saber que es tiempo de reposar y relajarse. Solo puede lograrlo quitando el pie del acelerador de vez en cuando. De otra forma el motor, va a quemarse.
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Este es el resumen del artículo "4 señales de que estamos a punto de quemarnos" publicado en Octubre 2013 en la revista Forbes.
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