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¿Dejar un empleo estable para montar una nueva compañía? | 
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| Comenzar una empresa desde cero mientras genera ingresos es la esencia del sueño americano. Pero si esto fuera fácil, tendríamos una avalancha de gente renunciando a sus empleos de 9 a 5 y comenzando su negocio. La autonomía que viene con construir un negocio en torno a sus objetivos personales, talento e intereses es algo irresistible; pero viene acompañada del estrés causado por dejar un empleo estable, lo que no debería tomarse a la ligera. Si está cerca de dar ese gran salto, siga estos consejos:
1. Evalúe el estatus de su empleo: muchos comienzan una empresa porque nadie está dispuesto a contratarlo para hacer lo que quieren hacer. Pero si tiene empleo, analice cuidadosamente si es el momento correcto de lanzarse por su cuenta. Si no está contento con su trabajo o no está ganando lo suficiente, puede ser simplemente que necesita cambiar de trabajo, no necesariamente independizarse. Considere todas las opciones antes de decidir que iniciar su empresa es lo correcto.
2. Analice cuidadosamente sus experiencias pasadas: existen muchas particularidades en cada mercado o segmento vertical que debe entender antes de emprender. Por otro lado, con frecuencia es alguien de afuera (y no un conocedor) quien logra impactarlo. Si puede crear un prototipo de su idea de negocio en las noches y fines de semana, disipará gran parte del riesgo y podrá llevarla al mercado sin tener que renunciar a su trabajo actual.
3. Considere su edad, familia y situación financiera: los jóvenes no necesariamente son tontos, simplemente no han tenido tiempo de acumular conocimiento ni dinero; por eso tienen más apetito de riesgo. A medida que pasa el tiempo, se vuelven más conservadores. La responsabilidad de tener una familia que cuidar y a la que proveer, puede hacerle evitar el riesgo de emprender; pero también puede ser un gran motivador. En cualquier caso, debe asegurarse que pueda pagar sus cuentas si el negocio tarda en despegar o si llega a fallar.
4. Pruebe su idea y sea un buen comunicador: la primera razón por la cual la mayoría de la gente no comienza un negocios es porque no están seguros de lo que quieren lograr, o se autoconvencen de no hacerlo. Hable con sus familiares, amigos, su red de contactos, y pruebe con ellos su idea. Obtenga feedback y utilícelo sabiamente. Una buena comunicación escrita y hablada es esencial para establecer un negocio, producto o empresa. No necesariamente necesita ser extrovertido o persuasivo, pero ciertamente estas habilidades le harán más fácil vender sus ideas.
5. Sea optimista: seguramente le dirán varias veces que lo que está haciendo no se puede hacer. Gente inteligente le dirá que está equivocado, le criticará y le negará financiamiento. Utilice estas críticas para trabajar más duro y probarles que tiene razón. Los pesimistas no comienzan negocios, los optimistas si. Antes de renunciar a un empleo estable, piénselo bien. Pregúntese: ¿los beneficios superan a las desventajas? ¿Está dispuesto a aceptar la posibilidad de ser derrotado? Si contestó afirmativamente, puede estar al inicio del camino del emprendimiento.
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Este es el resumen del artículo "¿Dejar un empleo estable para montar una nueva compañía?" publicado en Abril 2014 en la revista Mashable.
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