Google
Por Tema

Por Revista

Marzo 2016
Febrero 2016
Enero 2016
Diciembre 2015 libre
Noviembre 2015 libre
Octubre 2015 libre
Septiembre 2015 libre
Agosto 2015, Q2 libre
Julio Agosto 2015 Q1 libre
Julio 2015, Q1 libre
Junio 2015, Q2 libre
Mayo Junio 2015 libre
Mayo 2015, Q1 libre
Abril 2015, Q2 libre
Abril 2015, Q1 libre

Pruébenos gratis
Suscríbase
¿Cómo funciona?
Preguntas frecuentes
Sobre nosotros
Atención al Cliente



¿Vale la pena invertir en oro?



El oro tiene un atractivo atemporal, sobre todo para aquellos que están preocupados por la volatilidad del mercado bursátil, la inflación, la devaluación de la moneda o el colapso de la civilización. Sin embargo, no todo el mundo cree que el oro es el puerto seguro que sus defensores pregonan. Después de seguir una senda alcista en los últimos doce años, ha caído de forma abrupta en 2013. ¿Hasta qué punto es posible confiar en la demanda de una commodity que muy poca gente necesita? ¿Qué papel debería jugar en una cartera de inversiones? ¿Por qué su precio ha caído en los últimos tiempos?

El historial del oro como reserva de riqueza es irregular. Desde principios de 2001 hasta finales del verano de 2011, el precio del oro pasó de algo menos de US$ 300 la onza a cerca de US$ 1.900, lo que confirmaba la opinión de los defensores de esa commodity de que es un metal en que realmente vale la pena invertir. Sin embargo, ha habido también varios periodos decepcionantes. El oro llegó a poco menos de US$ 700 la onza en 1980, después cayó y ya no alcanzó el mismo nivel en los 27 años siguientes. A principios de este año, cotizaba a US$ 1.657, después cayó cerca de un 18% hasta situarse en aproximadamente US$ 1.355, mientras que el Índice Standard & Poor's 500 obtuvo una ganancia de cerca de un 18%.

El motivo de esas subidas y bajadas es siempre objeto de debate. Cuando el precio del acero sube o cae, la razón suele estar en el ritmo del crecimiento económico mundial. Los precios de los granos están fuertemente influidos por las condiciones climáticas. Pero el oro se mueve por la emoción. Los precios )del oro también se ven afectados por los vaivenes de la demanda de otras inversiones. Cuando las acciones parecen una buena opción, algunos inversores las cambian por el oro. La consecuente caída de la demanda favorece que su precio baje. La devaluación del oro este año coincidió con el rápido aumento de los precios de las acciones.

Como inversión, el oro tiene algunas desventajas. Quienquiera que posea una cantidad significativa del metal debe invertir en su protección, lo que representa un coste que afecta a su retorno. A diferencia del ahorro en un banco, de títulos o acciones que pagan dividendos, el oro no genera renta. Es un activo muy volátil con ingreso cero. El oro tampoco da derecho a la participación en los beneficios de una empresa, un beneficio del que solo disfruta el accionista. Los inversores que quieran seguridad pueden recurrir a los bonos del Estado, sabiendo que el Estado puede usar su privilegio de agente fiscal para pagar a los propietarios de sus títulos. Por el contrario, el precio del oro no cuenta con ningún respaldo.

En un periodo de hiperinflación, cuando la moneda pierde prácticamente su valor, o en épocas de gran desconfianza en la economía o en el sistema bancario, no hay duda de que el oro puede ser un puerto seguro. Actualmente, la inflación es muy baja, lo que elimina ese factor como razón inmediata para mantener reservas en oro. El inversor que quiera una protección garantizada contra una posible inflación futura tiene mejores opciones en los bonos de ahorro estadounidenses indexados a la inflación. Los bonos individuales garantizan un retorno modesto por encima de la tasa de inflación, al mismo tiempo que ofrecen protección contra pérdidas ocasionadas por la deflación o caídas de precios.

El inversor que se preocupa mucho por otras clases de activos puede dedicar una pequeña parte de sus inversiones al oro si quiere sentirse más tranquilo, con tal de que esté dispuesto a pagar tasas de almacenaje y obtener retornos insignificantes. Para evitar el coste de almacenaje, el inversor puede comprar acciones en los fondos de índices (exchange-traded funds, o ETFs), que poseen oro en especie guardado en cofres en lugares como Suiza. Los EFTs son un tipo de fondo mutuo negociados como acciones, facilitando la compra y venta de oro. Son una buena manera de especular con spot prices (precios al contado), o de mantener el oro almacenado por más tiempo para diversificar la cartera. Pero los EFTs de oro tal vez no sean buenos para la protección contra el caos financiero, social o político, porque su negociación depende de los mercados financieros, y el oro en sí aún es inaccesible. ¿Existe una solución mejor que el oro para el inversor preocupado por la crisis social? "Para los que se preocupan por la crisis social, tal vez fuera mejor que se trasladaran a vivir a Canadá", dice Franklin Allen, profesor de Finanzas de Wharton, en tono de broma.




Este es el resumen del artículo "¿Vale la pena invertir en oro?" publicado en en la revista Knowledge @ Wharton.

Vea otros artículos publicados en Knowledge @ Wharton u otros artículos sobre Finanzas personales.

deRevistas.com traduce y resume los mejores artículos publicados por las revistas más prestigiosas de Negocios y Gerencia. Cada quincena, le enviamos a nuestros suscriptores un nuevo ejemplar con unos 30 resúmenes.



 

Copyright 2003-2024 por Meltom Technologies Inc