|
Las drogas por dentro |
|
| Existen numerosos sitios de pequeños sembradíos de marihuana. Se trata de lugares encubiertos, granjas de alta tecnología donde no podría llegar el control del Estado y que proporcionan a sus dueños una cifra que ronda los US$ 80.000 en un ciclo de diez semanas. Ya son todo un éxito en Canadá, y promete crecer pese a todos los esfuerzos de organismos que combaten el narcotráfico. El tipo canadiense es cinco veces más potente que lo que se consumía en Estados Unidos en los setenta. Con precios que alcanzan hasta los US$ 2.700 por una libra, el comercio logra entre US$ 4 billones en todo el país y US$ 7 billones sólo en la provincia de Columbia Británica.
En los Estados Unidos la guerra contra las drogas se mantiene, pero en Canadá la marihuana es casi bienvenida desde que la economía está en decadencia. El turismo ha bajado así como el empleo y el borde limítrofe del país con Estados Unidos es un gran mercado. El problema es que no se trata de algunos sembradores fácilmente identificables, sino de cientos de ciudadanos ordinarios que se dedican al negocio. México sigue siendo el suplidor número uno, pero Canadá es notable por su dispersión, su producción o modus operandi difícilmente detectable. Los cultivadores logran US$ 900 por libra con márgenes netos entre 55% y 90%, dependiendo de la calidad. Ellos producen de media a 30 libras cada diez semanas, vendiendo sus productos a usuarios locales o a distribuidores quienes los llevan a los límites y suman hasta US$ 80 por libra. Una vez en terreno norteamericano el distribuidor permanece en la costa oeste. En Seattle una libra de alta calidad se vende a US$ 4.000 y ya cuando llega a Los Angeles alcanza los US$ 6.000. Luego la sustancia se vende por partes entre US$ 600 y US$ 800 por onza.
Esta es una industria creadora de empleos. La preparación de las flores secas para maximizar el sabor del producto se paga en US$ 15 por hora a un trabajador. Se organizan visitas para que los clientes admiren la calidad de las plantaciones del producto, se editan revistas con consejos para el cultivo, existen tiendas para abastecer a los cultivadores novatos y los vendedores de fertilizantes dirigen su mercadeo a este segmento. Algunas páginas Web desde Vancouver a Montreal venden la droga a pacientes en Canadá y para obtenerla sólo se necesita una carta firmada por un médico donde conste que la persona padece una de las 192 enfermedades que se alivian con su uso. Ahora el mercado está tan maduro que permite segmentaciones de acuerdo a los grados de calidad obtenidos como consecuencia del adecuado cultivo.
El método requiere de luz eléctrica por tratarse de lugares cerrados por lo que los cultivadores son bastante cuidadosos y obsesivos con los métodos (se valen de jardinería orgánica, cultivos hidropónicos y otras técnicas). La calidad depende de que las plantas se rieguen, se fumiguen y se poden, por lo que también necesitan de cuidadores especializados. En cuanto al control policial, los sembradores argumentan que sólo una quinta parte de ellos pueden terminar encarcelados, pero en todo caso los cultivos se reparten en varios lugares estratégicos. Pero a las autoridades les preocupa el peligro que puede representar la pobre instalación eléctrica que se usa para los invernaderos así como la alta concentración de productos químicos. Parte del problema es la actitud indiferente del público.
Algunos funcionarios piensan que puede que la batalla termine pronto. Rollie Woods, líder de la fuerza de narcóticos para el Departamento de Policía de Vancouver, se dio cuenta cuando algunos sembradores lanzaban los desechos de la poda de las plantas en un sitio de la ciudad destinado a la recolección de basura. Primero pidió a su staff anotar los números de las licencias de los automóviles que lo hacían (cientos de ellos) pero abolió su plan meses después cuando se dio cuenta de que no podría rastrearlos a todos. Ahora apoya la legalización. “Si no fuera por la presión de Estados Unidos, podríamos regular la situación”, expone Woods, quien tiene a sus agentes abocados a la persecución del comercio de la droga. Seguir invirtiendo en esta lucha puede ser de poca ayuda, “me pueden dar cientos de funcionarios, pero ello no haría diferencia alguna”.
|
Este es el resumen del artículo "Las drogas por dentro" publicado en Noviembre 10, 2003 en la revista Forbes.
Vea otros artículos publicados en Forbes u otros artículos sobre Narcotráfico.
deRevistas.com traduce y resume los mejores artículos publicados por las revistas más prestigiosas de Negocios y Gerencia. Cada quincena, le enviamos a nuestros suscriptores un nuevo ejemplar con unos 30 resúmenes.
|