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¿Un caso de estrés? | 
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| Cuando se trata de ventas, todos tenemos esos días en los que nada funciona como quisiéramos, cuando se hacen docenas de llamadas improductivas, cuando todo parece inclinarse en nuestra contra. La tensión afecta a las personas de maneras diferentes. Algunos padecen de dolores de cabeza, otros pierden la concentración. Cuando eso ocurre, se pueden tomar algunas acciones para disminuir el estrés. He aquí algunas sugerencias:
1. Ría. No es algo tan tonto como parece. La risa, según se ha demostrado, disminuye la tensión arterial, incrementa el oxígeno en la sangre y fortalece el sistema inmunológico, entre otras cosas.
2. Tome una siesta de 20 minutos. Puede incluso tomarla en la oficina, midiendo el tiempo por reloj. Eso proporciona la relajación necesaria sin que se sufran las consecuencias de un sueño excesivo.
3. Cambie las actividades. Repetir lo mismo siempre puede causar estrés, particularmente si no se logran resultados. Tome un descanso y haga ejercicios o busque algo que pueda hacer durante 30 minutos.
4. No ponga todos los huevos en la misma cesta. No todas las ventas funcionan bien; por tanto, asegúrese de tener alternativas. Si algo no funciona, al menos puede moverse a otro escenario donde se pueda lograr mayor retorno de inversión.
El estrés también puede ser un gran motivador y hacer que la gente vaya en otras direcciones, lo que no significa que se deba propiciar la situación para conseguir un estímulo extra. La meta es no pensar en las cosas que no se han hecho y evitar el estrés tanto como sea posible.
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Este es el resumen del artículo "¿Un caso de estrés?" publicado en Agosto 2004 en la revista Entrepreneur.
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