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El CEO a larga distancia



Revista: Inc
Tema: Emprendedores
Fecha: Octubre 2005
Autor(es): Donna Fenn
Mientras que la mayoría de los emprendedores se sumergen en sus negocios con celosa pasión por sus productos y servicios, muy pocos saben desde un principio cuál es el tipo de compañía que desean. Pero Stephen McDonnell sí lo sabía: quería una compañía como Applegate Farms (dedicada a la venta de carne orgánica y natural), capaz de crecer y tener éxito por sí sola. Así que tomó una decisión radical: desde un principio, decidió ir las oficinas sólo un día a la semana. Y, de hecho, esto ha sido así durante los últimos 17 años, y pareciera funcionar. Applegate ha sido rentable desde un principio. Las ganancias crecen 30% cada año. La productividad crece cada año. Finalmente, los costos laborales por libra de carne vendida disminuyen cada año.

Pero, ¿todo esto por no ir a la oficina? Pues, si. “Soy un jefe controlador y muy ansioso”, admite McDonnell, quien no esconde que puede ser muy enérgico. Mientras más habla, más parece que estuviera protegiendo su compañía de su propia tendencia a la microgerencia. “Exactamente, eso es”.

El secreto de Applegate está en su sistema de información. De hecho, hay 54 empleados conectados a 120 bases de datos repletas de cualquier información sobre la compañía que sea necesaria. Además, supervisan las 300 granjas (desde Uruguay hasta Quebec) que crían animales para Applegate; 12 mataderos; 18 plantas de procesamiento; y 350 minoristas. El resultado es que, aun trabajando desde casa “a las 5 de la tarde un viernes, sé más del negocio que muchos de los directores de las grandes compañías”, dice McDonnell.

Sin embargo, es obvio que McDonnell tiene que trabajar. Su compañía está repleta de empleados jóvenes; no tiene junta directiva; no hay director de recursos humanos; no hay políticas claras para los empleados; cuenta con un sistema de compensación mal definido y demasiado subjetivo. En otras palabras, es una compañía que ha crecido, pero que no ha madurado. McDonnell lo sabe, y está dispuesto a arreglar dicha situación cuando llegué a su meta: US$ 100 millones anuales. Sin embargo, hay algo que seguro no cambiará: McDonnell vendrá a la oficina sólo una vez a la semana.




Este es el resumen del artículo "El CEO a larga distancia" publicado en Octubre 2005 en la revista Inc.

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