|
Evitar las llamadas directas |
|
| En los últimos años, las llamadas directas (por teléfono, correo electrónico o visitas) han quedado eclipsadas por la popularidad de las redes. Sin embargo, limitar nuestros contactos comerciales a nuestros amigos y a los amigos de nuestros amigos puede hacernos perder grandes oportunidades. A continuación, algunos consejos para dominar el difícil arte de llamar directamente:
1. Llame cuando las defensas estén bajas: todo ejecutivo tiene una secretaria u otro filtro, así que lo mejor es llamar cuando estos no estén; por ejemplo, temprano en la mañana o a la hora del almuerzo cuando el ejecutivo está en su puesto pero sus asistentes no.
2. Busque algo en común con la persona que está llamando: cuando en un evento social conocemos a alguien por quien nos sentimos atraídos, las primeras palabras que salen de nuestros labios no son una invitación para salir por ahí. Por el contrario, primero nos presentamos y buscamos elementos comunes: por ejemplo, una universidad o un signo astrológico.
3. Compre antes de vender: si es posible, pruebe el producto o servicio de la compañía en la que trabaja la persona que estamos pensando llamar. De este modo, no podremos presentar como clientes con conocimiento.
4. Sea menos profesional: muchos novatos cometen el error de “sonar profesional”. Sus correos electrónicos parecen una publicidad, así que nadie les contesta de vuelta.
|
Este es el resumen del artículo "Evitar las llamadas directas" publicado en Diciembre 2005 en la revista Business 2.0.
Vea otros artículos publicados en Business 2.0 u otros artículos sobre Networking.
deRevistas.com traduce y resume los mejores artículos publicados por las revistas más prestigiosas de Negocios y Gerencia. Cada quincena, le enviamos a nuestros suscriptores un nuevo ejemplar con unos 30 resúmenes.
|