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Compre un tapete y eduque a una niña



Revista: Forbes
Tema: Gerencia Social
Fecha: Abril 17, 2006
Autor(es): Tatiana Serafin
En un reciente cóctel en la Connoisseur's Antique Fair de Nueva York, se vendieron 15 tapetes por un total de US$ 32.000. La venta no se vio afectada por el hecho de que el lugar estaba decorado con fotos de mujeres afganas pobres, que se habían pasado meses tejiendo los tapetes.

El artífice de esta venta, que beneficia a las mujeres afganas y a sus familias, es una ex directora de gerencia de Goldman Sachs, Connie K. Duckworth. Hace uno años, Duckworth viajó a Afganistán como miembro del Consejo Afganoamericano para la Mujer y descubrió que 98% de las mujeres afganas carece de documentos personales y 79% son analfabetas. Nueva de cada diez bebés nacen en casa sin atención médica, lo que ha convertido a Afganistán en el segundo país con la mayor tasa de mortalidad maternal. Fue entonces cuando Duckworth fundó una organización llamada Arzu.

Arzu coordina las actividades entre las tejedoras afganas en pueblos remotos y los compradores de tapetes en Estados Unidos. Las familias se inscriben para tejer tapetes para Arzu y reciben cerca de US$ 400 por unidad. Además, cada familia recibe un bono de 50% si se compromete a recibir educación y a entrar en programas de salud ofrecidos por Arzu. Las clases de lectura y escritura son una hora a la semana en las casas de las mujeres afganas. Un supervisor de Arzu supervisa si los niños están asistiendo a la escuela. Un chofer lleva a las mujeres a dar a luz en la clínica.

Para tejer a mano un tapete, se necesitan de 3 a 12 meses. Hasta los momentos, Arzu ha recibido 247 y ha vendido 206 en Estados Unidos, por un monto que oscila entre los US$ 1.000 y US$ 10.000. Los clientes de Duckworth compran los tapetes por un tercio menos de lo que los encontrarían en una tienda por departamentos. “Queremos convertirnos en la Dell de los tapetes afganos”, afirma Duckworth.




Este es el resumen del artículo "Compre un tapete y eduque a una niña" publicado en Abril 17, 2006 en la revista Forbes.

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