|
Redefiniendo fraude |
|
| Cuando los fiscales federales van tras un fraude, se valen principalmente del correo (es raro que un fraude en nuestros días no incluya el uso del correo o de algún medio de comunicación: teléfono, fax, correo electrónico, transferencias electrónicas, etc.). En un fraude clásico, el criminal le roba dinero a su víctima. Pero hace décadas, los fiscales comenzaron a utilizar las leyes antifraude para perseguir ciertos hechos de corrupción que no funcionan de este modo (por ejemplo, el soborno de funcionarios).
En estos caso, el funcionario no recibe dinero de la víctima, sino de quien lo soborna, que también está cometiendo un crimen. La víctima de este tipo de fraudes, decían los expertos, era el empleador del funcionario (corporación pública o privada), a quien se le estaba violando su derecho de recibir servicios honestos de su empleado. Los fraudes de este tipo abundan. De hecho, la extensión del concepto ha sido siempre un problema. En los años ochenta, hubo quien protestara porque dicho concepto incluía a personas que habían incurrido en violaciones morales menores.
A los liberales les preocupaba que se pudiera acusar a personas que no tenían idea de que su conducta podía ser considerada un crimen. Así que los tribunales decidieron dejar de lado dicho concepto. Sin embargo, al año pasado, entró de nuevo en vigor la ley de fraudes contra los servicios honestos. Pero aún no se han definido bien los límites de este crimen.
En los 20 años que ha durado esta polémica, muchas cortes de apelación han hecho interpretaciones del concepto. Sin embargo, hay una gran cantidad de jueces que continúan rechazándolo porque les parece demasiado vago y, por tanto, inconstitucional.
|
Este es el resumen del artículo "Redefiniendo fraude" publicado en Septiembre 04, 2006 en la revista Fortune.
Vea otros artículos publicados en Fortune u otros artículos sobre Fraudes y estafas.
deRevistas.com traduce y resume los mejores artículos publicados por las revistas más prestigiosas de Negocios y Gerencia. Cada quincena, le enviamos a nuestros suscriptores un nuevo ejemplar con unos 30 resúmenes.
|