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Presidente ejecutivo | 
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| Héctor Ruiz comenzó en abril de 2002 como CEO de AMD. Desde entonces, el fabricante de microprocesadores ha incrementado su porción de mercado. Ruiz es una persona muy poco pretenciosa y sería incapaz de alabarse a sí mismo. Y quizá esta sea su verdadera grandeza. La humildad es una de sus grandes virtudes. Pero hay tres más:
1. Trabajar velozmente: hemos crecido y todo es más complejo. Esto significa que cometeremos ciertos errores. Me siento mucho más cómodo cuando sé que esto ocurrirá. Pues significa que estamos aprendiendo. La gente que comete errores y aprende de los mismos comienza a desarrollar su confianza. En las reuniones, siempre les digo a los empleados que se muevan constantemente no que se detengan.
2. Acepte la ambigüedad: en parte, mi trabajo es procurar que la gente se sienta bien con el cambio y la ambigüedad. Esto suena contraintuitivo. Mucha gente cree que el CEO debe ser completamente claro y perfecto. Pero a mí no me gusta deletrear perfectamente lo que debe hacer la gente. Me parece que eso la limita.
3. Pensar más: a veces tomo el teléfono y llamo a alguien que me haga pensar. Esta semana llamé a un ejecutivo de Internet e intercambié ideas con él. Necesito entender mejor a las personas que ven el futuro de otro modo. De este modo soy capaz de ver todo el panorama y no perderme en los detalles.
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Este es el resumen del artículo "Presidente ejecutivo" publicado en Octubre 30, 2006 en la revista Fortune.
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