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El dragón tecnológico se tambalea | 
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| En los últimos años, el mundo ha visto con una mezcla de fascinación y aprensión cómo las compañías chinas de tecnología (que producen desde semiconductores hasta teléfonos móviles) se han colocado en la escena global. Los inversionistas se han apilado, esperando los beneficios provenientes de compañías como Intel o Dell. Pero los posibles rivales temen que, al igual que las japonesas o coreanas en su momento, las compañías chinas tomen la delantera.
Pero nada ha sucedido cual lo previsto. Entrar en las ligas mayores no ha sido sencillo para un grupo de compañías chinas de tecnología. Fabricantes de teléfonos móviles como TCL y Ningbo han perdido mercado ante gigantes globales como Nokia y Motorola. Por otra parte, los márgenes de ganancias de compañías como Huawei Technologies y ZTE se han reducido. Asimismo, BOE Technology Group, el mayor fabricante de pantallas de cristal líquido del país, se está expandiendo a otras áreas de negocio y está tratando de conseguir ayuda gubernamental.
Hasta el fabricante de computadoras Lenovo Group, la compañía más importante de China, está luchando en el exterior. La compra por parte de Lenovo de la división de PC de IBM en 2005 generó expectativas de que la compañía sería capaz de desafiar a Dell y Hewlett-Packard. Sin embargo, Lenovo, que continúa siendo líder en China, se está quedando detrás de sus competidores en el exterior. El 19 de abril, Lenovo anunció el despido de 1.400 empleados, es decir, 5% de su fuerza global; la mayoría de los despidos fueron en Europa y Estados Unidos.
Algunos de los problemas de las grandes compañías chinas de tecnología provienen de las fuerzas del mercado que influyen sobre las industrias de commoditis. Los fabricantes de pantallas de cristal líquido entraron en el negocio después de 2004, justo el año en el que el sector estaba en su mejor momento. Pero, desde entonces, sólo algunas de las compañías han generado ganancias. Pero el infortunio de las compañías chinas no depende únicamente de malas decisiones gerenciales. Una de las mayores ventajas de las compañías chinas de tecnología es que han recibido apoyo del gobierno; sin embargo, esto se ha convertido también en su punto débil. A cambio de los préstamos, deducciones de impuestos y condiciones favorables, el Partido Comunista participa en las decisiones de las compañías. Y esto ha resultado fatal para las compañías.
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Este es el resumen del artículo "El dragón tecnológico se tambalea" publicado en Mayo 14, 2007 en la revista Business Week.
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