|
El nuevo acto de Al Gore |
|
| Es la hora del almuerzo en Sand Hill Road, y Al Gore quiere respuestas. “¿Cómo disminuye la eficiencia dependiendo de la latitud?”, pregunta. “¿Cuál es el poder de una planta? Si un fabricante como General Electric quisiera hacer unas turbinas más pequeñas, ¿la tecnología funcionaría a una menor escala?” Están sentados en la sala de conferencias de Kleiner Perkins Caufield & Byers, donde los socios están sosteniendo su reunión semanal. Gore está formulándole preguntas al equipo gerencial de Ausra, una compañía apoyada por Kleiner, cuya tecnología se vale de espejos para enfocar la luz solar y generar electricidad.
Una vez que Gore queda satisfecho con las respuestas, deja atrás su actitud inquisidora. Mientras venía a la reunión habló con la senadora Barbara Boxer y parece que el Congreso no le extenderá a Ausra ninguna deducción tributaria. Sin embargo, Gore se ofrece para organizar una cumbre que presente el potencial de la tecnología termal de la compañía a abogados y legisladores. Además, señala que sería beneficioso hacer una reunión con General Electric, a pesar de que Ausra es un pequeño cliente. “Conozco bien a Immelt”, señala, refiriéndose al director general de GE. “Debemos fijar una cita”.
Gore, político en recuperación, ambientalista y ganador del Premio Nobel está añadiéndole otro título a su currículo: capitalista de riesgo. Tras “una conversación que ha durado un año y medio”, según Gore, el ex vicepresidente acaba de unirse a su viejo amigo John Doerr como socio activo de Kleiner Perkins, la principal firma de inversiones de Silicon Valley.
De acuerdo con Doerr, más de un tercio de las inversiones de Kleiners (US$ 600 millones) serán destinadas a tecnologías que reduzcan las emisiones de dióxido de carbono. Kleiner ya ha invertido más de US$ 270 millones en 26 compañías que hacen de todo: desde microbios que limpian viejos pozos petroleros hasta automóviles eléctricos. Doerr, que cuenta entre sus triunfos inversiones iniciales en Netscape, Amazon y Google, entrará en la exclusiva junta de Generation Investment Management. Esta es la firma de inversiones de US$ 1 mil millones que Gore fundó hace tres años con David Blood, ex presidente de Goldman Sachs Asset Management, para analizar e invertir en compañías “sustentables”.
|
Este es el resumen del artículo "El nuevo acto de Al Gore" publicado en Noviembre 26, 2007 en la revista Fortune.
Vea otros artículos publicados en Fortune u otros artículos sobre Capital de riesgo.
deRevistas.com traduce y resume los mejores artículos publicados por las revistas más prestigiosas de Negocios y Gerencia. Cada quincena, le enviamos a nuestros suscriptores un nuevo ejemplar con unos 30 resúmenes.
|