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Por qué Iran está hambrienta por hacer negocios con EUA | 
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| Desde hace mucho tiempo, Irán se ha mostrado como un lugar de negocios poco atractivo para los inversores extranjeros e incluso empresarios locales. Sin embargo, el presidente Barack Obama parece traer un poco de esperanza para el pueblo iraní y su debilitada economía, al expresar sus intenciones de limar asperezas con Teherán y de levantar, eventualmente, algunas sanciones económicas impuestas por el anterior gobierno.
Los empresarios iraníes, por su parte, esperan que sus líderes nacionales le den acogida a esta iniciativa de Obama para suavizar tensiones y lograr así reactivar su sector industrial y empresarial, los cuales se encuentran, actualmente, al borde del colapso.
Es más, esta posible mejora de las relaciones entre ambos países podría incluso ser beneficiosa para compañías de EUA y de otros países occidentales, ya que éstas podrían sacar provecho del capital humano iraní, que se caracteriza por ser sumamente calificado en áreas como la informática, aviación, industria petrolera y gasífera.
Si bien el presidente de Irán Mahmoud Ahmadinejad sigue con su retórica anti-imperialista, otros líderes nacionales, entre ellos el ex-primer ministro Hossein Moussavi la figura opositora de las próximas elecciones presidenciales, están a favor de las negociaciones con el gobierno de EUA y proclaman estar listos para un cambio. Por ahora, la mayoría de los ejecutivos iraníes comparten las ideas de Moussavi y esperan que, de ser elegido presidente, este líder llegue a implementar reformas para sacar a Irán del aislamiento económico.
Sin embargo, para que estos países lleguen a tener buenas relaciones internacionales, habrá que superar varios obstáculos primero. Uno de ellos es el programa nuclear seguido por Irán y rechazado por EUA. Otro tiene que ver con la sentencia del periodista iraní a ocho años de prisión por cargos de espionaje en Washington. Aunque estos hechos los aleja de su misión de estrechar lazos entre sí, existe un factor que puede mantenerlos unidos: Ambos países pueden colaborar, en Afganistán, para acabar con la influencia talibana y, en Iraq, para facilitar el retiro de soldados de EUA.
La economía iraní está en déficit no sólo por la caída de los precios de petróleo y la crisis financiera, sino también por la mala administración de su actual gobierno populista. Es por ello que, al cooperar con EUA y al tener a Obama como aliado, Irán tendría mucho que ganar, pues podría lograr 1) atraer un poco de inversión extranjera, 2) contar con la participación de más bancos europeos en el país, 3) deshacerse de algunas sanciones económicas y restricciones en su desarrollo energético y 4) ofrecer mayor garantías a las empresas locales.
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Este es el resumen del artículo "Por qué Iran está hambrienta por hacer negocios con EUA" publicado en Mayo 4, 2009 en la revista Business Week.
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