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Chávez va por los perforadores de petróleo | 
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| En su incesante búsqueda de chivos expiatorios, el mandatario venezolano Hugo Chávez es rápido en señalar con su dedo a países del extranjero. Ahora, el comandante ha encontrado un nuevo lote de extranjeros a quien culpar: en vez de a los gigantes de la industria petrolera, esta vez se encuentra acosando a compañías de servicios petroleros, quienes ejecutan perforaciones y otros trabajos de importancia para la compañía estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA). “No le pagaremos a las contratistas que han tratado de especular y no les importa nuestra compañía”, advirtió a finales de abril el presidente de PDVSA, Rafael Ramírez.
PDVSA ya les debe a contratistas y proveedores unos US$3 mil millones. La compañía procesadora de gas natural de Tulsa, EUA, Williams Cos. ha apartado US$241 millones para cubrir los pagos atrasados de Venezuela y la compañía está amenazando con paralizar todos los trabajos en el país a menos que obtenga el dinero. La contratista de perforación marítima Ensco International paralizó sus trabajos en enero luego de que Venezuela confiscara sus maquinas perforadoras en una disputa de pagos, aunque ambas partes lograran un nuevo acuerdo sobre el contrato a principios de mayo.
Las cosas se podrían tornar aun más frustrantes para los extranjeros. A principios de mayo, la Asamblea Nacional dio aprobación preliminar a un proyecto de ley que permitiría a PDVSA apoderarse de servicios como la inyección de agua a pozos petrolíferos y compresión de gas natural. Estos trabajos son llevados a cabo actualmente por compañías privadas; el anteproyecto dice que éstos serán compensados. La medida todavía se enfrenta a unos cuantos obstáculos antes de que se convierta en ley. Pero la atmósfera en Caracas ya tiene un efecto congelante sobre la inversión privada en el sector petrolero, la cual cayera el año pasado a US$500 millones desde casi el doble de ese nivel en 2007, de acuerdo a la Asociación de Hidrocarburos de Venezuela, un grupo comercial de compañías extranjeras involucradas en el negocio del crudo.
La última vez que Chávez le buscara pleito a compañías petroleras, los precios de los crudos pesados venezolanos se dirigían a niveles récord. En 2007, Chávez nacionalizó cuatro sociedades en participación, incitando a ExxonMobil y ConocoPhillips a marcharse del país. Ahora, a pesar de que los precios del crudo están desplomándose, Chávez todavía quiere sacarles más dinero a los extranjeros.
Eso es porque PDVSA, quien provee alrededor de la mitad de las rentas del gobierno, está en problemas. La compañía registró ingresos de más de US$120 mil millones el año pasado, pero este año posiblemente sólo verá alrededor de US$50 mil millones. En abril, PDVSA recortó los salarios gerenciales en un 20% e impuso un congelamiento de salarios para el personal raso –una acción que podría envenenar próximas negociaciones de contratos con sus sindicatos. Y la compañía ha recortado drásticamente las inversiones en US$10 mil millones, retrasando tres nuevas refinerías en Venezuela y dos en el extranjero. PDVSA debe invertir en el negocio debido a que, como dice un experto en la materia, “se debe alimentar a la vaca si se quiere que de leche”.
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Este es el resumen del artículo "Chávez va por los perforadores de petróleo" publicado en Mayo 18, 2009 en la revista Business Week.
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