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Anatomia de un rumor



Revista: Entrepreneur
Tema: Comunicaciones
Fecha: Septiembre 2009
Casi cualquier empresa, sin importar su tamaño, está rodeada por rumores – desde despidos, promociones y reducciones presupuestarias, hasta la liposucción del jefe. La mayoría de las veces, las habladurías en la oficina son inofensivas, pero ocasionalmente, esas conversaciones pueden destruir la confianza y sabotear la productividad.

El psicólogo del rumor Nick DiFonzo, autor del libro “El efecto dispensador de agua”, ofrece un mapa de la progresión de un rumor de oficina, y sugiere algunas formas para prevenir que alguno de ellos se salga de las manos:

1) La creación: hay rumores sobre todo tipo de cosas, pero hay tres categorías que prevalecen con mayor frecuencia: a) la calidad del trabajo de alguien, b) si alguien mantiene o no su empleo y c) cambios de personal. Aunque parezca contraintuitivo, los rumores de oficina son extremadamente acertados. Si a la gente le interesa el tema, y consiguen formas de revisar la veracidad, el rumor mejorará su precisión con el tiempo.

2) La difusión: los rumores circulan más rápido gracias a aquellos que tienen muchas conexiones o son “centros sociales”. Las secretarias, los gerentes, los supervisores – cualquiera que esté conectado con muchas ramas de la organización.

3) El impacto: los empleados puede perder su confianza en la gerencia, y entre ellos. En una ocasión, pudimos ver como corrían rumores totalmente negativos sobre la gerencia. Estos contribuyeron al sentimiento de que los gerentes eran extraños, totalmente fuera de contacto con las preocupaciones de los empleados.

4) La mitigación: los rumores pueden durar por siempre, pero si se manejan efectivamente, pueden morir. Busque a los superdifusores, entrégueles una refutación detallada y pídales que los difundan. Limite la incertidumbre que experimenta de la gente. Genere un cronograma en el que se anunciarán las novedades. Y responda a los rumores rápidamente, basado en la verdad. Si niega algo que sea cierto, eventualmente se sabrá y perderá todo el poder para refutar rumores en el futuro.

5) La aceptación: los rumores son parte natural de las redes sociales. Tenemos que respetar sanamente el poder de los rumores, tanto positivos como negativos. Lo mejor es manejarlos éticamente y apropiadamente.




Este es el resumen del artículo "Anatomia de un rumor" publicado en Septiembre 2009 en la revista Entrepreneur.

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