Google
Por Tema

Por Revista

Marzo 2016
Febrero 2016
Enero 2016
Diciembre 2015 libre
Noviembre 2015 libre
Octubre 2015 libre
Septiembre 2015 libre
Agosto 2015, Q2 libre
Julio Agosto 2015 Q1 libre
Julio 2015, Q1 libre
Junio 2015, Q2 libre
Mayo Junio 2015 libre
Mayo 2015, Q1 libre
Abril 2015, Q2 libre
Abril 2015, Q1 libre

Pruébenos gratis
Suscríbase
¿Cómo funciona?
Preguntas frecuentes
Sobre nosotros
Atención al Cliente



El lado oscuro de los incentivos



Revista: Business Week
Tema: Compensación y salario
Fecha: Noviembre 23, 2009
Pocas cosas irritan más al pagador de impuestos de EUA que los gigantescos bonos que reparten las firmas de Wall Street. Esto ha generado amplias discusiones sobre la necesidad de hacer los incentivos más inteligentes; esto haría que las empresas se manejen mejor, pero solo temporalmente.

Los incentivos tienen un error ineludible, tal como lo demuestran 35 años de investigación: la empresa recibe exactamente aquello por lo que paga, pero esto nunca resulta ser lo que quería. La mecánica es sencilla: por necesidad, los incentivos se calculan en base a algún “índice” que es relevante para la empresa y fácil de medir, como por ejemplo el precio de la acción. Pero en poco tiempo, aquellos cuya existencia depende de ese índice, consigue como manipularlo, haciéndolo menos confiable; logran hacer que aumente, pero sin mejoría real, lo que puede incluso llegar a poner en peligro a la empresa.

Es así como los incentivos no sólo fallan, sino que con frecuencia salen por la culata. Estudios lo demuestran: 1) al ofrecer incentivo económico a los ciudadanos suizos para que voten a favor de permitir un basurero en su comunidad, la disposición a aceptar baja 2) al imponer multas a los padres por recoger tarde a sus hijos en las guarderías, aumentan las llegadas tarde 3) al ofrecer un pago simbólico a los transeúntes para que ayuden a cargar un sofá, disminuye la disposición a ayudar. Esto demuestra que el incentivo tiende a eliminar la dimensión moral de la toma de decisiones. A pesar de nuestra fe en los incentivos como mecanismo para influir en el comportamiento, generalmente logran lo opuesto.

Algunos piensan que los banqueros no tienen esa dimensión moral – siempre han estado interesados en ganar dinero. Pero tradicionalmente, también han estado al tanto de sus responsabilidades (se preocupaban por la cosecha o por el nuevo negocio de su cliente). No eran santos, pero servían a los dos lados, rentabilidad y servicio comunitario. Hoy en día quedan muchos de esos banqueros, en los bancos comunitarios y sindicatos de crédito, y tienen portafolios hipotecarios sanos, porque los aprueban para mantenerlos en sus libros en lugar de titularizarlos y revenderlos para generar ganancias inmediatas que aumenten sus bonos de fin de año.

En la reciente reunión de los 20, Francia y Alemania propusieron estrictos límites a la compensación ejecutiva. EUA tiene ahora un “Zar de pago”, que recientemente redujo a la mitad la compensación de 136 ejecutivos. Pero los montos absolutos de los pagos son inconsecuentes. La mayoría de las personas quieren hacer el bien. La idea es apartar a los grandes de la industria de la deshonrosa tradición de incentivos, y empujarlos hacia estructuras de compensación que no eliminen la dimensión moral de la toma de decisiones.




Este es el resumen del artículo "El lado oscuro de los incentivos" publicado en Noviembre 23, 2009 en la revista Business Week.

Vea otros artículos publicados en Business Week u otros artículos sobre Compensación y salario.

deRevistas.com traduce y resume los mejores artículos publicados por las revistas más prestigiosas de Negocios y Gerencia. Cada quincena, le enviamos a nuestros suscriptores un nuevo ejemplar con unos 30 resúmenes.



 

Copyright 2003-2024 por Meltom Technologies Inc