|
Escasez de alimentos en Cuba: hambrientos por un cambio |
|
| Hace dos años en el mes de febrero, Raúl Castro formalmente tomó posesión del poder en Cuba de la mano de su convaleciente hermano mayor, Fidel. El cambio aumentó las esperanzas por reformas, especialmente para el eternamente disfuncional sector de la agricultura en el país comunista. Las cifras oficiales demostraron que en los dos primeros meses de este año las entregas realizadas a los mercados de alimentos en la capital fueron un tercio menos que lo pronosticado. Nadie se muere de hambre, pero los supermercados donde se paga en moneda metálica se quedan por semanas sin artículos de primera necesidad como la leche y el pan.
¿Qué ha salido mal? Las fincas del estado son masivamente ineficientes y raramente abastecen a más del 20% de las necesidades alimentarias de la nación. Tres huracanes en 2008 empeoraron las cosas. Raúl Castro ha reconocido el problema y presentó algunos cambios. Las tierras ociosas del estado han sido dadas en arriendo a agricultores de capital privado. El gobierno ha aumentado los precios garantizados que paga para producir. Los agricultores ya pueden adquirir legalmente su propio equipamiento básico como palas y botas, sin tener que esperar por donaciones por parte del gobierno.
Pero los agricultores dicen que las reformas han sido demasiado poco sistemáticas para ser efectivas. En reuniones por todo el país, ellos han pedido más de ellas. Ellos desean comprar sus propios fertilizantes y pesticidas así como controlar la distribución. El gobierno todavía se encarga de abastecer casi todo y lo hace muy mal. Mucha de la extraordinaria cosecha de tomates del año pasado se pudrió debido a que los camiones del gobierno fallaron en recolectarla a tiempo.
De manera significativa, los medios de comunicación del estado han reportado las quejas de los agricultores con algo de detalle. Además han anunciado que 100 de las fincas gubernamentales menos eficientes serán clausuradas. Y reportes de la zona este de Cuba sugieren que la escasez de alimentos en ese sitio son menos intensos que en la capital.
Pero Raúl continua obrando cautelosamente. Así que Cuba comprará muchos de sus alimentos de proveedores extranjeros. La moneda extranjera, nunca en abundancia –en parte debido al embargo económico de EUA– se encuentra de nuevo escaseando. La recesión mundial disminuyó las ganancias de Cuba provenientes del níquel y el turismo el año pasado. Las importaciones cayeron casi un 40% el año pasado.
Un empresario extranjero en La Habana dice que hay más señales de escasez este año. Las transferencias de dinero al extranjero han sido bloqueadas, o retrasadas, por meses. El propietario español de Vima, un importador de alimentos que abastecía a varios hoteles y restaurantes del estado, cometió el error de criticar públicamente los retrasos en los pagos adeudados. Sus contratos fueron revocados sin demora. Las empresas extranjeras han sido advertidas de que el gobierno puede dejar de venderles artículos de primera necesidad, como carne y arroz, utilizados en los comedores de su personal.
|
Este es el resumen del artículo "Escasez de alimentos en Cuba: hambrientos por un cambio" publicado en Marzo 27, 2010 en la revista The Economist.
Vea otros artículos publicados en The Economist u otros artículos sobre Negocios en Cuba.
deRevistas.com traduce y resume los mejores artículos publicados por las revistas más prestigiosas de Negocios y Gerencia. Cada quincena, le enviamos a nuestros suscriptores un nuevo ejemplar con unos 30 resúmenes.
|