|
Después de todo |
|
| “Él tiene principios y convicciones”, decía la cita de Demóstenes Torres incluida en la lista de los 100 brasileros más influyentes de 2009 de la revista Época. El senador del estado de Goiás, continuaba diciendo la publicación, no “era tan sólo otro traficante de influencias políticas”.
Alrededor del mismo tiempo, la policía que investigaba actividades ilegales de apuestas se encontraba interviniendo telefónicamente a Carlos Augusto Ramos (conocido como Carlinhos Cachoeira o “Carlitos Cascada”), un hombre de negocios que se creía estar ligado con el famoso juego de la lotería ilegal, conocido como jogo do bicho (juego animal). Entre las personas que lo contactaban con mayor frecuencia estaba el Sr. Torres, con quien hablaba sobre leyes y proyectos a futuro, y a quien le pidió dinero. El Sr. Torres insiste en que el Sr. Cachoeira es tan sólo un amigo cercano. Así que presuntamente visitará al Sr. Cachoeira en prisión, donde está siendo retenido por sospechas de lavado de dinero, corrupción y manejo de una red ilegal de apuestas.
Los escándalos son normales en Brasilia, pero éste en particular promete regar cantidades inusuales de estiércol. A finales de abril, el Congreso lanzó una averiguación sobre la influencia política del Sr. Cachoeira. Éste ha reunido a un comité investigador que puede verificar o mandar a llamar a cualquiera que quiera que testifique, y posee acceso a registros confidenciales de bancos, impuestos y llamadas telefónicas. Hasta ahora ha designado a tres ayudantes federales, dos directores (así como al Sr. Torres) y a personas de interés. También planea investigar a Delta, una gran empresa brasilera de construcción. Uno de los antiguos gerentes de la compañía se encuentra ahora en prisión luego de aparecer en las grabaciones telefónicas.
Los abogados de los políticos que aparecieron en las cintas están intentando que la evidencia obtenida sea declarada inadmisible –precisamente por la relación cercana que tienen sus clientes con el Sr. Cachoeira. Ellos sostienen que ya que los poseedores de altos cargos sólo pueden ser investigados por sus similares, la policía debió retirarse tan pronto vio que la lista de contactos frecuentes del Sr. Cachoeira se leía como un “Quién es Quién” de tipo político. La policía respondió que los políticos eran secundarios con respecto a su investigación principal, y que ellos le avisaron al Procurador General, Roberto Gurgel, acerca del ángulo político hace tres años. El comité está planeando invitar al Sr. Gurgel para que explique la razón por la cual no hizo nada hasta que las grabaciones se filtraron a la prensa.
Cualesquiera que sean los argumentos legales, abandonar las averiguaciones probablemente podría causar demasiada ira pública para que éstos sean factibles. Por ahora, los costes políticos de la investigación parecieran abalanzarse sobre la oposición y el gobierno de centroizquierda de Dilma Rouseff. El Sr. Torres estaba afiliado con los Demócratas, un partido conservador que ya había sido debilitado por las deserciones. Su vergüenza pública puede dificultar su supuesto plan para fusionarse con el partido más grande de oposición.
|
Este es el resumen del artículo "Después de todo" publicado en Mayo 05, 2012 en la revista The Economist.
Vea otros artículos publicados en The Economist u otros artículos sobre Política.
deRevistas.com traduce y resume los mejores artículos publicados por las revistas más prestigiosas de Negocios y Gerencia. Cada quincena, le enviamos a nuestros suscriptores un nuevo ejemplar con unos 30 resúmenes.
|